P. Garrido Hernández
Arxiu d'Etnografia de
Catalunya, n.º 17, 2017
El trastorno disocial, aplicado a niños y
adolescentes, es el que implica un patrón según el cual el individuo tiene un
comportamiento anormal para su edad que le lleva a entrar en conflicto con las
normas y con los derechos o necesidades de los demás, lo que implica en
ocasiones la comisión de delitos…
… El hecho de no haber encontrado correlato
orgánico indiscutible para los trastornos descritos en sus manuales
diagnósticos implica que el ámbito de la salud mental sea uno de los que más
críticas enfrentan dentro del circuito asistencial de la salud en general…. Principalmente
en el ámbito de la educación, la psicología y la antipsiquiatría, la
explicación en la que se incide con mayor ahínco es aquella que refiere a una
suerte de cambios en la sociedad y su reflejo en la población infantil y
juvenil, que no han tenido correspondencia con las capacidades para
gestionarlos desarrolladas por el sistema educativo en concreto y la sociedad
adulta en general.
....
Respecto a los menores diagnosticados, hay
dos factores principales que condicionan la identidad que el sistema les
atribuye: la edad y la patología. Como hemos visto, el hecho de encontrarse en
un periodo de la vida identificado en nuestra cultura como conflictivo de por
sí condiciona la intensidad de enfrentamiento socialmente aceptada como “normal”.