sobre menores con problemas de
conducta internados en centros específicos en la Comunidad Valenciana.
Centros
de protección específicos de menores con problemas de conducta.
Síndic de Greuges, Comunitat Valenciana, 2017
....
En el curso de la investigación, el Síndic ha visitado los cinco centros de protección específicos de menores con problemas de conducta existentes enla Comunidad Valenciana.
En su conjunto suman 86 plazas, ocupadas al 100% en la actualidad, destinados a
la atención de chicas y chicos, de entre 12 y 17 años, sujetos a guarda o
tutela de la Generalitat
que presenten conductas disruptivas o disociales recurrentes que trasgreden las
normas sociales y de convivencia así como los derechos de terceros. El 70,5% de
las/los menores internados se encuentran bajo la tutela de la Generalitat.
En el curso de la investigación, el Síndic ha visitado los cinco centros de protección específicos de menores con problemas de conducta existentes en
En el caso
de estos menores tutelados por la Generalitat el Síndic lo tiene claro, en
demasiadas ocasiones las conductas que provocan los ingresos de menores
tutelados en estos centros específicos son fruto de las situaciones de
desprotección a las que han estado expuestos a lo largo de sus vidas. “No
olvidemos que son niños y niñas muy dañados a nivel emocional y psicológico que
han pasado por vivencias familiares muy duras hasta finalmente encontrarse en
desamparo”. Cuando pasan a ser tutelados por la Administración ,
estos menores comienzan otra odisea, el peregrinaje por las distintas medidas,
recursos y centros de protección. Todo este vaivén y la incertidumbre mantenida
sobre su futuro provocan consecuencias irreversibles en su desarrollo emocional
y cognitivo.
El otro 29,5% de menores internados están bajo la guarda de la Generalitat. En
muchos de estos casos, las familias, ante la falta recursos intermedio
sanitario y/o educativo para atender situaciones graves de inadaptación
familiar y social del menor (como pueden ser conductas agresivas dentro y fuera
de la familia, violencia filioparental o el consumo de tóxicos), desbordados
por la situación llegan a solicitar a la Administración
medidas temporales de separación familiar, lo que se traduce en el
internamiento del menor en este tipo de centro.
Otra de las anomalías que ha detectado el Síndic en su
informe es que un número importante de los/as menores atendidos/as en estos
centros no tiene el perfil previsto legalmente para su ingreso. Cholbi se
refiere a menores con discapacidad o con enfermedad mental diagnosticada que
permanecen internos/as en estos centros, cuando la ley lo prohíbe expresamente
e indica que se les debe garantizar un tratamiento específico por parte de los
servicios competentes en materia de salud mental y discapacidad. “No olvidemos
que en este tipo de centros está prevista la utilización de medidas de
contención y de restricción de libertades o derechos fundamentales”.
Asimismo, el Síndic advierte de que la deficiente dotación
de recursos de salud mental infanto-juvenil (ambulatorios, centros de día,
apoyo a las familias, etc.) así como la ausencia de recursos
residenciales específicos para atender a menores (no necesariamente en
situación de desprotección) con problemas de salud mental o diversidad
funcional está provocando que la única Administración que atiende este tipo de
problemáticas sea la
Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas.
En este sentido, considera “escasa” la implicación de otras
administraciones, especialmente sanidad y educación, que en ocasiones provoca
un efecto perverso al considerar desprotección situaciones que podrían haberse
resuelto desde la red sanitaria o educativa, si hubieran estado bien dotadas....
Fuente: Síndic de Greuges